Recuerdan cuando eran niños y cuando planeaban las vacaciones tenían un calendario y al despertar cada mañana sabían cuantos días les quedaba para el viaje, el día antes contaban las horas, en el avión contaban los minuto… Eso hice yo con este viaje, sin imaginar las sorpresas que traería el camino.
El primer día en Los Ángeles fue una gran alegría, saber que por fin había llegado, los últimos meses han sido los más difíciles en el año, Sammy tuvo una cirugía, un problema respiratorio, estuvo dos veces en el hospital, tuvimos que mudarnos 2 veces y mi estado de ánimo lo confieso no era el mejor.
Me tranquilizaba saber que regresaría al lugar con el cielo azul infinito, la gente amable y un olor a mar que inunda la ciudad.
En los últimos meses Andy yo nos apoyamos mutuamente, siempre pensando en nuestro próximo destino de vacaciones, esta canción se convirtió en nuestro mantra
El día comenzó cuando salimos del aeropuerto teníamos 6 maletas de equipaje y 4 de equipaje de mano, en total 10.
Llegamos a San Salvador en la tarde disfrutamos de la cerveza local, después de unas horas tomamos el avión que nos traería a Los Ángeles.
Al llegar a inmigración el encargado no pudo ser más amable (Gracias a Dios para mi el mejor lugar para inmigración es Estados Unidos, son las personas más amables de todos los aeropuertos) antes de salir al aeropuerto, uno de los oficiales preguntó por qué tantas maletas, eran 4 maletas grandes con más de 70 kilos de regalos (Panela, Café, Arequipe, Ron, Aguardiente)
Al salir del aeropuerto con un bebé y la cantidad de maletas, nos encontramos con Bill (hermano de Andy) y Yolanda (Mamá de Andy) que nos recibieron con un amoroso y caluroso abrazo, al llegar a casa descargamos maletas y nos acostamos, para nosotros ya eran las (4:00 AM) y en 2 horas cumpliríamos 24 horas despiertos.
Al despertar entregamos algunos de los regalos a Bill y disfrutamos de un riquísimo café colombiano, de aquí caminamos al Del Amo, un centro comercial que está a tan solo a 15 minutos (tiene una propiedad alquilable de 3 millones de pies, Andy me contó que cuando él era niño era el más grande del mundo,) honestamente yo sentía que caminaba y caminaba y nunca llegaba al final.
Tenía ganas de un Chai, pero el efectivo lo dejamos en el carro la noche anterior así que lo deje en manos del universo, con tan buena suerte que estaban en la promoción de una nueva máquina que hacía todo tipo de bebidas, entre ellas Chai.
Era momento de regresar debía mirar los vestidos que Angie (hermana de Andy) tenía para la gala anual del Club Rotario de Colombia en los Ángeles que sería esa noche, probé varios de los vestidos pero fue este el que se robo mi corazón desde que lo saque del carro, me sentía como adolescente que va al PROM del colegio, con el vestido elegido, regresamos al Del Amo a almorzar y comprar unos zapatos para Sammy.
Con alegría, música, amor de familia y bailando con Andy termino lo que sería el primero de los varios días en los Ángeles.
Soy consciente que el universo entero conspiró para que esté justo aquí y ahora, solo tengo agradecimiento infinito por esta oportunidad, espero aprender las lecciones que la vida tenga para mi y compartir con ustedes las aventuras y enseñanzas que este lugar tenga para nosotros.
Te lo mereces, he seguido tus historias y se que no ha sido fácil.
Gracias por compartir esos momentos que demuestran que el trabajo duró y el agradecimiento son la receta para alcanzar los sueños.
Angela.
Gracias mil por tu comentario, muchos piensan que llegar hasta aquí ha sido fácil sin contar las horas de trabajo, sudor y lagrimas, pero solo los valientes son los que consiguen dejar atrás el pasado y comenzar una vida desde 0, para cumplir sus sueños.
El llegar aqui no hubiera sido posible sin D-s a quien siempre entregamos los viajes y nos sorprende de manera increíble.
Me vinieron recuerdos a la mente con el video de Randy Newman, Los
Ángeles es maravilloso, pero si alguna vez tienes la oportunidad de pasarte por Ciudad Ibague, en
Colombia, tú y tu familia la pasaran de maravilla, he estado allí y es estupendo.
Gracias Angel, tendré en cuenta tus recomendaciones cuando visite Colombia de nuevo.
Saludos.